Que el suave resplandor de la mañana de Pascua arroje una luz única sobre la existencia humana y dé sentido a este mundo desconcertante, donde debemos permanecer confinados en nuestros propios hogares para ayudar a poner fin a esta pandemia.

Esta crisis de coronavirus nos está preparando para resucitar en otro mundo, un mundo mejor.

Es conmovedor ser testigo de las infinitas posibilidades de comunicación que nos acercan a nuestros seres queridos, la creatividad de tantas personas que buscan medios adaptados para servir y la generosidad de las personas que desean ayudar a los más necesitados.

Al mismo tiempo, me gustaría subrayar los esfuerzos de todos los miembros de la Sociedad de los Misioneros de los Santos Apóstoles, quienes continúan acompañando a los más pobres de manera material y espiritualmente, guiados por la valiente espiritualidad de Eusebio-Henri Ménard.

Seamos solidarios en la acción, que es la mejor oración que podemos hacer en estos tiempos difíciles cuando vemos la transformación de nuestro hogar temporal, la Tierra.

“Se necesita muy poco, nos dice Eusèbe-Henri Ménard, para cambiar una vida: amor en el corazón y una sonrisa en el rostro“.

Señor, danos, como a la Samaritana, agua de tu “manantial que brota de la vida eterna”.

¡Felices Pascuas!

ACERCA DE DENIS GAUTHIER

Hombre de negocios, ex-jesuita y de origen amerindio, herencia que lo enorgullece particularmente, Denis es un universo en sí mismo. Un universo que se diseña paciente pero decididamente al llevar a cabo proyectos mobilisadores y construir amistades fieles. Amante de la naturaleza, apasionado por el ser humano, Denis es un maestro en el arte de convencer y rodearse de personas motivadas y creativas.